Termino

Moría por que fueran las nueve, tan solo eran diez para las nueve, pero estaba desesperado.
Comíamos en la suite de Roxy cualquier tipo de snacks, ya que la comida brasileña es un poco picante para nosotros y preferimos no comerla ahora.
-¿Seguro que no quieres ir con nosotras?- Preguntó Sara
-Estoy seguro, además ya contacte a las gemelas y mañana saldremos con ellas. Una noche sin una fiesta no le hace daño a nadie.
-Te contamos si hay algo interesante – Dijo Roxy
Comenzamos a ordenar todo en la habitación y cada uno nos fuimos a nuestra respectiva suite.

Entre a la mía con rapidez, en pocos minutos Sophia estaría aquí y por fin se rebelaría la razón de su extraño comportamiento.
Estaba muy tenso, tenía que pensar como saludarla. Estaba enojada me gritaría en el instante que llegara aquí si no decía algo para callarla.
Mire el reloj, un minuto y serían las nueve, ella llegaría puntual y precisa como siempre.
De pronto Sophia apareció frente a mí, más bien arrodillada.
Me puse a su altura y la mire a los ojos sin decir nada, esa había sido mi conclusión que Sophia hablara. Yo tenía 18 años y me comportaba como un niño de 15.
Sophia también me miraba sus labios temblaban, estaba furiosa.
No decía nada, ella tampoco. Los dos esperábamos que uno hablara.
Sophia suspiro y finalmente parecía decidida a hacer algo.
Y sí que lo hizo, dándome una cachetada y luego otra.
Quede con mi mirada fija donde mi rostro ladeado había quedado. Quizás me merecía esto hace mucho, por engañarla, borrar su memoria, tratarla como una basura en mi fiesta. Ella solo se dio cuenta hace poco y que sus perdones hacia mí ya no tenían sentido, yo me equivocaba siempre.
-¿Por qué no has dicho nada? ¿Se te acabaron las excusas? ¿Por qué sigues conmigo entonces? ¿Para qué sigues fingiendo que me amas? ¡Sam me conto todo! ¡Tyler también se decepciono! ¡Pero te sigue hablando! ¿¡Cómo es posible!?- Grito con desesperación
-Tienes razón. Debí decirte todo, que te había engañado y quizás sea eso, me equivoco tanto que si se me acabaron las razones para disculparme, porque ya no tengo perdón. Sigo contigo tan solo por el hecho que eres lo más importante en mi vida. ¿Cómo piensas eso? ¡Te amo más que a mi propia vida. Te digo mi amor porque aunque mi vida acabe, mi amor por ti no ¡Nunca lo dudes!- Respondí lo principal para luego tomar aire -¿Qué te conto Sam? ¿No quieres escuchar mi parte de la historia? ¿De qué se decepciono Tyler? El me ayudo a borrarte la memoria-.
Toda mi calma quizás sorprendió a Sophia, yo siempre tan impulsivo y agresivo, ahora totalmente controlado sin decir nada fuera de tono.
-¡El tema de borrar mi mente ya lo tengo casi superado!- Exclamó –Pensé que lo de Sam no fue más que un ataque de superficialidad tuyo, no creo que de veras me ames si haces todo esto. Es una situación difícil ¿Qué le diré a mi madre y a Katia? ¿Cómo les explicó que lloro por las noches y que no me quiero casar porque hay un chico? Dustin creo que es hora de terminar con todo esto, si no te gusta, si quieres alejarte de nosotros-
-Princesa, entiendo que no me quieras perdonar o quizás terminar conmigo. Tienes todo el derecho en cortar conmigo pero no digas que yo quiero alejarme o que no me gustas, no sabes que dices.
-Terminamos- Dijo con una lágrima asomada en su mejilla.
Respire despacio, me resistí a no suplicar, a no besarla, abrazarla o cualquier cosa de tacto con ella.
-Te quiero, no ¿Qué digo? Te amo. Ten suerte en Irlanda, encuentra a alguien que no te haga sufrir como yo lo hago- Dije con toda la sinceridad de mi corazón.
Me acerqué a ella y bese su mejilla con ternura.
-Espero que tú también seas feliz y encuentres a una chica…
-Nadie se comparara a ti, no tienes que decirme que encuentre a alguien yo…
-… Jamás encontrare a alguien como tú Dustin Knight, pero juntos nos hacemos daño.
Entrelace su mano con la mía y la mire a los ojos
-¿Seguirás viniendo para ver a Emma y los demás?- Pregunte
-Sí, aunque te advierto que estaré distante ya he llegado a odiarte de una forma que jamás creí, te amo también pero el odio y el amor son sentimientos muy fuertes y cuando sientes ambos por una persona todo se vuelve confuso y diferentes… cortante, frio, indiferente.
-Lo estás haciendo más difícil Sophia. Di que me odias y punto, lo entiendo, me duele pero lo entiendo.
-Adiós- Sophia se levantó, se veía muy diferente extrañamente de una manera tierna, pero demasiado diferente para mi gusto.
-Buen viaje- Comente por lo bajo
Vi como ella caminaba pasos atrás, me levante para ver a Sophia por última vez, para decir adiós novia.
-Te…- Antes de que pudiera decir algo tenía a Sophia juntando sus labios con los míos.
-Te amo-Susurro junto a mis labios
Sentí como la euforia crecía en mí y luego un golpe en la cabeza por parte de Sophia
-Y también te odio con todo mí ser, porque me haces sufrir tanto-Dicho esto Sophia se fue.
Me caía a pedazos, era eso lo que sentía. No más te amos por parte de Sophia o besos… nada. Absolutamente nada.